El Papa León XIV ofrece el Vaticano como sede de negociaciones entre Rusia y Ucrania
El Papa León XIV ofrece el Vaticano como sede de negociaciones entre Rusia y Ucrania

Tras el fracaso de las negociaciones entre Rusia y Ucrania en Estambul, el papa León XIV lanza un audaz llamado a la paz y propone al Vaticano como terreno neutral para un encuentro directo entre ambas partes. Su iniciativa, cargada de simbolismo y diplomacia, posiciona a la Santa Sede como un actor clave en la resolución de uno de los conflictos más devastadores del siglo XXI.

Ciudad del Vaticano, 16 de mayo de 2025

En un gesto que ha captado la atención del mundo entero, el nuevo papa León XIV ofreció formalmente al Vaticano como sede neutral para conversaciones de paz entre Rusia y Ucrania. El anuncio se produce en un momento de estancamiento diplomático tras el colapso de las negociaciones en Estambul, marcadas por la ausencia del presidente ruso Vladimir Putin, quien originalmente había promovido los encuentros.

El cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, fue el encargado de transmitir la iniciativa del pontífice, asegurando que “la Santa Sede está disponible para facilitar un encuentro directo entre las partes en conflicto”. Parolin expresó su decepción por el estancamiento actual, calificando la situación de “trágica” y “muy difícil”.

“El papa quiere hacer del Vaticano un lugar de encuentro directo entre las dos partes”, señaló Parolin a medios italianos. “Esperábamos que se iniciara un proceso lento pero positivo hacia una resolución pacífica del conflicto. Estamos de nuevo al principio”.

El papa León XIV, nacido Robert Prevost y primer estadounidense en ocupar el cargo, asumió el pontificado apenas el pasado 8 de mayo. Desde el inicio, ha mostrado una firme voluntad de intervenir activamente en los conflictos internacionales, marcando una diferencia sustancial respecto a su predecesor, el papa Francisco.

Durante su primer mensaje dominical desde el balcón de la Plaza San Pedro, León XIV utilizó un lenguaje contundente al referirse a Ucrania, llamando a una “paz justa y duradera”. Este enfoque se alinea con la narrativa de Kyiv y ha sido bien recibido por la comunidad internacional que espera una mediación efectiva.

Cardenal Parolin, en visita diplomática a Ucrania

En una llamada telefónica reciente, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski invitó al pontífice a realizar una visita apostólica a Ucrania. Además, el papa se reunió el jueves con el arzobispo mayor Sviatoslav Shevchuk, cabeza de la Iglesia greco-católica ucraniana, quien le obsequió una pintura simbólica titulada Requiem Prayer, en homenaje al sufrimiento del pueblo ucraniano.

La propuesta del papa llega en un momento clave: la comunidad internacional busca desesperadamente una vía que logre romper la inercia del conflicto, que ya lleva más de tres años. El Vaticano, con su neutralidad histórica y capacidad de convocatoria moral, podría ofrecer una alternativa creíble para reiniciar las negociaciones.

Sin embargo, el camino no será fácil. La representación rusa en Estambul fue considerada de bajo nivel, y las probabilidades de un cese al fuego efectivo parecen escasas si Moscú no muestra voluntad política real. Además, el conflicto se ha entrelazado con otros escenarios geopolíticos, como la guerra en Gaza, sobre la cual Parolin comentó que aún no existen condiciones para una mediación desde la Santa Sede.

En paralelo, Parolin también se refirió a la posible reunión entre el papa y el vicepresidente estadounidense JD Vance, quien asistirá a la misa inaugural del pontificado. La agenda, repleta de delegaciones, podría dificultar el encuentro, aunque el Vaticano no descarta la posibilidad.

El papa León XIV ha dejado claro que su pontificado estará marcado por un renovado compromiso con la paz y la justicia global. En su primer mensaje en la red social X, escribió: “Que este saludo de paz resuene en vuestros corazones, en vuestras familias, y entre todos los pueblos del mundo”. Una declaración que, más allá de su tono pastoral, deja ver la voluntad política del Vaticano de volver a ser un actor relevante en la diplomacia internacional.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here