El regreso de González Urrutia a Panamá deja a la expectativa a la comunidad internacional, recordemos que Urrutia fue el ganador de las elecciones presidencias en Venezuela (Julio-2024) y estuvo en el país centroamericano a principios de Enero.
casualmente su retorno coincide con la gira que inicio el secretario de Estado Marco Rubio por Panamá, Costa Rica, Guatemala, El Salvador y Republica Dominicana, siendo su primer viaje internacional tras haber asumido el cargo de secretario de Estado por parte de la presidencia Trump.
02/02/2025
Panama – Urrutia regresó a Panamá la noche del viernes 31 de enero de 2025. Este regreso se produce en un contexto político complejo, marcado por la lucha por el poder en Venezuela y las relaciones tensas entre el gobierno de Nicolás Maduro y la comunidad internacional.
Está previsto que durante esta gira Marco Rubio aborde con los presidentes de estos cinco países latinoamericanos la situación de Venezuela, con el objetivo de reforzar el trabajo en favor de la restauración de la democracia y de buscar una solución y el reconocimiento absoluto de Edmundo González Urrutia como presidente constitucional. Los cinco países ya mencionados buscan condenar las elecciones robadas en Venezuela por Nicolás Maduro y castigos al ilegitimo y su cúpula; mantener y reforzar ese trabajo en conjunto será un gran tema de conversación entre el secretario Rubio y los cinco presidentes.
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La llegada del líder opositor a Panamá se da tras la visita a Caracas de Richard Grenell, enviado especial del presidente Donald Trump cuyo Gobierno no reconoce el tercer mandato de Nicolás Maduro y considera a González Urrutia como el presidente electo del país suramericano. El objetivo de la visita de Grenell era informar que Venezuela no mantiene relaciones diplomáticas con los Estados Unidos y que este aceptase vuelos de deportación de migrantes indocumentados venezolanos y conseguir la liberación de ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela.
obsesionado con disminuir la presencia de China, recuperar el Canal de Panamá y detener la migración hacia Estados Unidos el secretario de Estado Marco Rubio aterrizo el pasado Sábado al país centroamericano en medio de protestas y manifestaciones en contra de los Estados Unidos y en defensa de su territorio. Rubio se reunirá con el presidente panameño José Raúl Mulino quien se encuentra preocupado y con ánimos de entregar cualquier cosa menos lo que la mayoría de los panameños consideran propio; el Canal de Panamá.
Mulino repite que el Canal no es negociable. “Es de Panamá y seguirá siendo de Panamá”, palabras las cuales enfatizo e hizo referencia a la situación actual que viven, lo recalco en la inauguración del Foro Económico Internacional América Latina y el Caribe. Mulino ha sido el encargado de inaugurar la plenaria del foro y ha aprovechado para lanzar un mensaje en defensa de la soberanía de su país sobre el canal interoceánico, clave para el comercio mundial.
Estas declaraciones se producen en un momento en el que la nación centroamericana se ha visto afectada por los deseos expansionistas de Donald Trump, quien ha amenazado retomar le control de la infraestructura y ha levantado dudas sobre la presencia china en él. Si bien hay empresas de Hong Kong con puertos en ambos extremos de la vía marítima, no es cierto, como ha dicho el estadounidense, que China controle el canal.
Rubio y Murillo, Solución inmediata y toma de poder del canal panameño.
Un día después de que Trump anunció grandes aranceles para Canadá y México provocando represalias de esos países, Rubio adoptó un enfoque quizás menos confortativo y más diplomático, saludando cordialmente al ministro de Relaciones Exteriores de Panamá, aunque ni él ni el presidente Mulino hablaron públicamente en su reunión. Rubio planeaba visitar una instalación energética y luego el canal objeto del intenso interés de Trump. Por su parte, el presidente Mulino propuso que equipos técnicos esclarezcan las dudas sobre supuesta presencia china en el canal de Panama. Mulino también dijo que él no veía ninguna amenaza «real» contra los tratados por los que Estados Unidos entregó a su país el control del canal de Panamá.
El canal, construido por estadounidenses, fue entregado a los panameños en 1999 y ellos se oponen firmemente a la demanda de Trump de devolverlo. A pesar del rechazo de Mulino a cualquier negociación sobre la propiedad algunos creen que Panamá podría estar abierta a un compromiso bajo el cual las operaciones del canal en ambos lados sean retiradas de la empresa Hutchison Ports con sede en Hong Kong, a la cual se le dio una extensión de 25 años sin licitación para operarlas. Ya está en curso una auditoría sobre la idoneidad de esa extensión y podría llevar a una nueva licitación.
Lo que no está claro es si Trump aceptaría la transferencia de la concesión a una empresa estadounidense o europea como cumplimiento de sus demandas, que parecen abarcar más que solo operaciones.
El viaje de Rubio, quien también irá a El Salvador, Costa Rica, Guatemala y la República Dominicana, se produce en medio de una congelación de la asistencia extranjera de Estados Unidos. El Departamento de Estado dijo el domingo que Rubio aprobó exenciones para ciertos programas críticos en los países que está visitando, pero se desconocen los detalles.
